Los vampiros energéticos. Quiénes son, cómo evitarlos y cómo comportarse con ellos

Se pueden definir como "vampiros energéticos" o "vampiros emocionales", todos aquellos individuos que succionan la energía mental y emocional de una persona dejándola exhausta y con una gran sensación de agotamiento.

 Cualquiera puede ser un vampiro energético , sea consciente de ello o no. Puede ser un compañero de trabajo, un vecino, un amigo o incluso tu pareja. Aprender a reconocerlos y saber cuáles son las estrategias a implementar para defenderse, puede resultar muy útil. 

Esto, tanto para conservar sus energías como para protegerse de un gran estrés físico y mental. El primero en clasificar a este tipo de personas fue el Dr. Albert J. Bernstein en su libro: Vampiros emocionales: cómo tratar con personas que te drenan., es decir, cómo tratar con las personas que te "drenan".

Cómo reconocer a un vampiro energético

No siempre es fácil reconocer a un vampiro energético , pero existen algunos comportamientos y actitudes recurrentes que pueden facilitar la identificación de este tipo de personas, permitiéndote así elevar tus barreras de defensa.
Por lo general, un vampiro de energía hace que los problemas de la persona con la que está hablando sean triviales y magnifica los suyos. Este comportamiento se debe a que se alimenta de la energía emocional de los que tiene delante. 

Si, por tanto, "el objetivo" se encuentra en un estado de tristeza, desesperación y aflicción dada por un problema, el vampiro energético lo menosprecia dándole poca importancia y desvía la atención hacia sí mismo y sus dramas.

Otro elemento útil para identificar a un vampiro energético es la tendencia, por su parte, a sentirse mejor que la persona a la que se dirigen. Son narcisistas y les cuesta sentir felicidad hacia los demás a los que suelen menospreciar por ser los protagonistas de la escena.

¿Cuáles son los objetivos favoritos de los vampiros energéticos?

Generalmente, los blancos predilectos de los vampiros energéticos son las personas más sensibles y compasivas porque están naturalmente predispuestas a escuchar y por lo tanto, al abrir su corazón a los demás, representan una gran fuente de energía. No es raro que los vampiros de energía se aprovechen de la disposición amable de una persona para quitarle su vitalidad. 

Por ejemplo, monopolizan el tiempo de una persona, como en la vida social, apoyándose en el sentimiento de culpa cuando uno rechaza una invitación de ellos.
Por lo general, un vampiro energético tiene poca inclinación a seguir las reglas, no soporta que le digan que no y, dado que en las suyas es una persona muy insegura, suele criticar, insultar y acosar a sus víctimas para hacerlas a su vez frágiles e inseguras.

Cómo defenderse de los vampiros energéticos

Como se anticipó, cualquiera puede ser un vampiro energético , y lo que es más grave es que muchos de ellos ni siquiera son conscientes de que tienen este comportamiento hacia los demás. Después de hablar de cómo reconocer uno, también es necesario saber defenderse y saber reaccionar.

Lo más importante que debe hacer es establecer límites: por lo tanto, limite las interacciones tanto como sea posible, no acepte sus invitaciones, etc. Bloquear la interacción que busca el vampiro evita que robe energía.
Otro aspecto fundamental: no recurras a un vampiro energético en busca de consejo tener apoyo emocional. Pretenderá estar preocupado solo para hacer que su víctima esté emocionalmente disponible nuevamente. Un buen consejo es limitar tu emotividad frente a un vampiro energético; esto significa reducir sus expresiones faciales, reaccionar con la mayor frialdad posible y ser indiferente a sus solicitudes o invitaciones.

Todas estas prácticas, si se aplican correctamente, podrán excluir definitivamente a este tipo de personas de sus vidas, protegiendo así su salud mental y manteniendo su bienestar psicofísico.